Que rápido paso, parece que fue ayer aquel miércoles 24 de julio, estábamos preparando la pandilla una churrascada para celebrar el día de Galicia, cuando empieza a correr la noticia como la pólvora, radios, televisiones y redes sociales van incrementando poco a poco del número de víctimas. Un año donde poco más se sabe de lo que se sabia, entro la justicia imputó a unos otros y demás, cada uno intenta librar su responsabilidad de la maldita curva de A Grandeira, maquinista, ingenieros, empresa, gobiernos, etc todos están pero nadie es.
Angrois es un barrio compostelano, pasamos una y otra vez, ahora lo conocemos por el accidente del Alvia, y como no por su gente que sin ningún medio, fueron los primeros en socorrer, para todos es un fatal recordatorio que vivirían toda la vida en su recuerdo. Que decir de los familiares, como les cambio a todos la vida en este corto espacio de tiempo, sus planes creados para un futuro, trabajos, parejas, hijos, fueron al traste en un abrir y cerrar de ojos, quien se imaginaba que les cambiaría tanto la vida a todos los familiares en solo un año. Todos son víctimas del accidente que tarde o temprano se recuperan con mas o menos tiempo.
Para todos paso rápido menos, Pedro, José, María, Roberto, etc hasta 220, todas estas ya hace un año que el reloj les paro.
Curva de A Grandeira
Galicia sacudido una vez más
El fatal accidente de tren de Compostela, deja cerca de 220 familias marcadas por el infortunio, no volverá a ser igual, siempre abra un antes y un después. Secuelas imposibles de olvidar, muchas víctimas y heridos, cada uno con sus historias, sus proyectos que se vieron truncados por subir en el maldito tren.
Así empezaba la entrada de hace un año, poco o nada me equivoque de lo que sucedería, el dolor y el horror vivido se convirtió en indignación. sigue… Galicia sacudido una vez más
Terminando de empezar 
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